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Somos un grupo de trabajo encargado de recopilar diccionarios y glosarios científicos y técnicos que faciliten el trabajo a los estudiantes a la hora de consultar términos especializados. Hemos intentado ofrecer diccionarios que sirvan, en medida de lo posible,para responder las posibles dudas que puedan aparecer ante términos de un ámbito especializado y no se puedan consultar en otros diccionarios generales. También se encuentran diccionarios que combinan los términos en varios idiomas, de este modo, no solo se encontrarán definiciones, sino también equivalentes para cada término.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Procedimientos complementarios


3.2.4.2.          Procedimientos complementarios


Vinay y Darbelnet conceden una gran importancia al concepto de compensación, que tiene por objeto equilibrar las pérdidas o ganancias semánticas que toda traducción, que no sea un mero calco literal, comporta. Para Vázquez-Ayora, la teoría de la compensación se basa en dos hechos fundamentales: la dificultad de encontrar la equivalencia natural y acertada, y la pérdida de contenido o matices que sufre una versión.

        
         Como ya se ha indicado, en todo acto de traducción pueden darse pérdidas o ganancias semánticas, que deberán –o no- ser compensadas con alguno de los procedimientos descritos, o bien mediante otros que Vázquez-Ayora denomina “complementarios”, entre los que incluye la amplificación y la explicitación, como formas de expansión analítica, y la omisión, como forma de reducción sintética, además de la compensación, como procedimiento técnico específico.

Amplificación expansión analítica

Cuando la estructura de la lengua a la que se traduce así lo requiere,  habrá que hacer una amplificación del texto original, que puede afectar a las preposiciones, los adverbios u otras categorías gramaticales:

         We are dancing to the accordion.
         (Bailamos al son del acordeón).

         The house beyond the church.
         (La casa que está más allá de la iglesia).

         The boys there don’t like sports.
         (A los chicos que viven allí no les gustan los deportes).

         I don’t know what you mean.
         (No sé lo que quieres decir).

         Es un procedimiento que debe administrarse con prudencia porque permite decir lo mismo pero con más palabras. Reclamamos prudencia desde el principio porque la longitud es uno de los peores enemigos del traductor literario. La amplificación supone introducir nuevas unidades.

         Aparte de la obvia necesidad semántica o gramatical, el traductor puede aprovecharse de esta adición para sumar sílabas, por ejemplo, en un verso, como se deduce de este ejemplo: “nombrar” = “decir el nombre”. El recurso, así entendido, es de aplicación opcional, según los casos (1) y (2) del siguiente ejemplo:

         And God, like a father rejoicing to see
         His children as pleasant and happy as he
         (…)
         (W. Blake. “The Little Vagabong”).

        
(1)
         Y Dios, como un padre que se regocija de ver
         A sus niños tan amables y felices como él
         (…)
         (Traducción de E. Caracciolo Trejo).

         (2)
         Y Dios, como un padre que se alegra al ver
         A sus hijos tan contentos y jubilosos como él lo está
         (…)
         (Traducción de J.L. Caramés y S. González Corugedo).

         (3)
         Y Dios, como un padrazo contento de ver
         A sus hijos tan amables y felices como él
         (…)
         (Traducción de Cristóbal Serra).

         (4)
         Y Dios, como un padre gozoso al ver
         Sus niños tan divertidos y felices como él
         (…)
(Traducción de Soledad Capurro).

         (5)
         Y Dios, como un padre contento de ver
         A sus hijos tan buenos y felices como él
         (…)
         (Traducción de Elena Valentí).

         La forma opcional queda establecida en los ejemplos (1) y (2).


No obstante, también existen casos de amplificación obligatoria. He aquí un ejemplo:

As the cat
climbed over
the top of
the jamcloset
first the right
forefoot

carefully
then the hind
eteppend down
into the pit of
the empty
flowerpot


Veamos, por último, una amplificación obligatoria de carácter gramatical en los versos siguientes:

Speak gently, she can hear
The daisies grow.

(Oscar Wilde. “Reuiescat”.)
(1)
Con voz queda, si habláis, pues ella escucha
Crecer las margaritas.

(Traducción de M. Manet).

(2)
Habla en voz queda, que puede oír crecer las margaritas.
(Traducción de Julio Gómez de la Serna).

(3)
y hablad quedito, porque oye cómo
crecen las margaritas.
(Traducción de Fernando González).


Otros casos clasificados de amplificacón:

Amplificación del adverbio:

Interestingly, this group has a heavy representation.
Es interesante advertir que este grupo tiene una fuerte representación.

Amplificación del verbo:

To generalize.
Hacer generalizaciones.

To erupt.
Entrar en erupción.

Amplificación del sustantivo:

Within two weeks.
En un plazo (en el curso de) de dos semanas.

Amplificación por relativización:

The girl in the living room.
La muchacha que está en la sala.

Explicitación


A veces, es preciso explicitar en el TLT elementos que están implícitos en el contexto del TLO. Mediante la explicitación se facilita la interpretación, evitando un vacío en la comunicación del mensaje:

         To help resolve the basic question of delegation.
(Para ayudar a resolver el problema fundamental de la delegación de poderes).

Sin la explicitación “de poderes”, el segmento “la delegación” sería ambiguo, ya que podría aplicarse también a la designación de delegados. Será el buen sentido del traductor el que decida, en cada caso, sobre la conveniencia de aplicar o no este procedimiento.

Se trata de ofrecerle al lector aquellos datos sin los cuales existe el peligro de perder alguna referencia; esta referencia, que para el traductor está clara por su conocimiento de la lengua original o por su dominio del tema, puede pasar desapercibida para el lector.

Esto es, la explicitación consiste en expresar en la LT lo que está implícito en el contexto de la LO. En verdad hay con frecuencia importantes índices semánticos y metalingüísticos sobreentendidos en la LO que el traductor debe hacer explícitos en la LT. Con este método se persigue una finalidad ‘explicativa’ y ‘especificativa’.

La explicitación puede, por tanto, ser usada  para reforzar una alusión vaga, para especificar relaciones anafóricas y catafóricas (cuando la situación extralingüística pueda malinterpretarse) y para otros muchos casos.

Veamos otros ejemplos:

Not like the rending tumult of American cities, the noise of the unbandaging of great giants in agony.
(Malcom Lowry. Under the Volcano).

No semejantes al desgarrador tumulto de las ciudades norteamericanas, el ruido que produce el desvendar gigantes agónicos.
(Traducción de Raúl Ortiz y Ortiz).


Raúl Ortiz, traductor mexicano, conoce muy bien la manía de los estadounidenses por autodeterminarse “americanos”; ni que los canadienses, los centroamericanos o los sudamericanos no lo fueran también. Este conocimiento, como es obvio, no es lingüístico, sino cultural. 

Omisión

Tanto la amplificación como la explicitación suponen una expansión o adición de elementos. El procedimiento opuesto es la omisión, que consiste en una concentración o supresión de elementos del TLO:

         The committee has failed to act.
         (La commission no actuó).

         Una traducción literal podría haber sido: “la comisión dejó de actuar”. Pero, en tal caso, se daría a entender que la comisión estuvo actuando, pero que cesó en su actuación, lo cual traduce una idea totalmente distinta de la que se expresa en el TLO. Esto es, se produciría una distorsión por el hecho de haber realizado una traducción literal, al transmitir un elemento que no está sino en apariencia en el original.

         La omisión es el recurso mediante el cual se eliminan unidades del original atendiendo, fundamentalmente, al mandato de la economía lingüística. Un texto que reproduce todas y cada una de las unidades de origen puede resultar abotargado y extraño; tal efecto se evita aplicando el recurso de la omisión. En un caso típico de omisión, el elemento eliminado desaparece sin dejar rastro alguno, rasgo que lo diferencia de la compensación.

         La tipología de la omisión es variada, y su causa también. Nida habla sobre la omisión de referencias, de conjunciones, de vocativos, de categorías gramaticales, etc. Vázquez-Ayora menciona la omisión de redundancias abusivas, de algunas formas concretas (en inglés, el auxiliar “can”, el participio de presente de “to use”, de “there” cuando es seguido de un verbo distinto a “to be”, etc.), de sujetos pronominales,  y del sujeto anafórico “it” (aunque estos últimos en español dejan un rastro en el verbo), y de muchas otras formas. En Newmark, la omisión tiene el nombre de “contraction” y es siempre de carácter gramatical. Los tres autores están de acuerdo en que con ella se evita la indeseable sobretraducción.

         La omisión puede ser igualmente obligatoria u opcional. Como obligatoria, presenta los rasgos de la convergencia, es decir, varias unidades convergen en una. Suele ser bastante frecuente:

         Cecily:                   Worn out by your entire ignorance of my
                            Existence, I determined…
         (O. Wilde. The Importance of Being Earnest.)
        
         Cecilia:         Cansada de la absoluta ignorancia en que
                            Estabas de mi existencia, determiné…
         (Traducción de B. Montuenga).

         En este ejemplo, dos unidades del original se han convertido en una única unidad. ¿Podría haber sido de otra forma?, ¿tiene el traductor alguna otra opción?. Con seguridad, no. Por ello, a este tipo de omisiones llamaré omisión obligatoria o por convergencia.

         Se puede ver otro ejemplo de lo mismo en el apartado de la explicitación, referido al verbo “to set forth” traducido como “partir”. Esto suele ocurrir con los llamados ‘phrasal verbs’.

         A diferencia del anterior, en el ejemplo siguiente, se presenta un caso de omisión opcional motivada por la redundancia, con claro beneficio para la longitud del metro:

        
Thus grew the tale of Wonderland:
         Thus slowly, one by one,
         Its quaint events were hammered out-
         And now the tale is done,
         And home we steer, a merry crew
         Beneath the setting sun.
         (Lewis Carrol. Alice’s Adventures in Wonderland.)

         (1)
         Así el país maravilloso
         Sobre el yunque del yo,
         Episodio tras episodio,
         Su leyenda, forjó,
         Y al ocaso, un mundo de amigos
         El alma nos pobló.
         (Traducción de Gutiérrez Gil).

         (2)
         Así fue surgiendo El País de las Maravillas
         Poco a poco; y una a una
         El cincelado de sus extrañas peripecias…
         Y ahora que el relato toca a su fin,
         También el timón nos guía de vuelta al hogar;
         Alegre tripulación, bajo el sol que se pone.
         (Traducción de Jaime de Ojeda).
        
         Independientemente de las libertades que algunos traductores se han permitido (evidentes en los últimos versos de la primera versión), todos coinciden en omitir la palabra “tale” del original. Por un lado, porque hubiese dado una longitud excesiva al verso: “Así creció el cuento de El País de las Maravillas” (15 sílabas frente a 8 del original). Por otro, porque está claro que habla sobre cómo nacieron las historias, los sucesos, el cuento de El País de las Maravillas.

         Existen algunos casos de omisión facultativa u opcional que conllevan una pérdida de información, que uno nunca sabe si llamar “error de traducción”; a veces, dicha omisión también se debe a una imposibilidad traductiva:

         Watching the sailing cloudlet’s bright career.
         (Keats. Soneto).                                         

         (1)
         …y acechando sus ojos
         la fúlgida carrera de una pequeña nube.
         (Traducción de M. Manet).

         (2)
         mirando la brillante carrera de las nubecillas navegando.
         (Traducción de Arturo Sánchez).

         (3)
         …con la mirada puesta
         en la clara carrera de nubes en deriva.
         (Traducción de J.M. Valverde).

         Podríamos traducir simplemente el adjetivo: “nube navegante” (aunque también se podría amplificar y convertir el adjetivo en una forma compleja: “que navega”). El primer traductor no parece haberlo captado así, o no ha considerado oportuno tenerlo en cuenta; de cualquier modo, el resultado es una pérdida significativa en el terreno del lenguaje figurado. Esto mismo se ha resuelto positivamente en las traducciones (2) y (3).

Compensación

Sin en la omisión un término podía desaparecer sin dejar rastro alguno, en la compensación ocurre que, ante la imposibilidad de mantener un rasgo de importancia, bien sean efectos sonoros, o métricos, bien sean unidades semánticas, se opta por compensar la pérdida que dicha imposibilidad ocasionaría, de modo que el lector no desconozca totalmente la riqueza o los matices del original. El esfuerzo del traductor debe estar encaminado a buscar una equivalencia estilística, pero debe rechazar todo lo que suponga traspasar el tono, enmendar, o dar rienda suelta a la propia creatividad a propósito del texto original. El traductor tiene a su alcance, en palabras de Vázquez-Ayora, “toda una gama de efectos expresivos, como el relieve, la sorpresa, la anticipación, la reticencia, el suspense, la ironía, etc”. Con este recurso, la traducción adquiere validez estilística, que, sobre todo  en traducción literaria, es tan importante como la gramatical.

        
Veamos el siguiente ejemplo:

         When to the sessions of sweet silent though
         I summon up remembrance of things past,
         (…)
         (W. Shakespeare. Soneto XXX).

         Cuando en sosiego y soledad repaso
         Recuerdos, vivos solo en la memoria,
         (…)
         (Traducción de Juan M. Seco del Cacho).

        
En el TLO se dan una serie de coincidencias que elevan el tono poético. La unión de los sonidos /s/ y /m/, mensajeros del silencio y la memoria, una medida versal de diez sílabas, y una apreciable precisión en el vocabulario, resultan opciones casi imposibles de combinar, a menos que el traductor renuncie a algunas de ellas. Un breve análisis de la traducción descubre que los esfuerzos del traductor se han centrado en la creación de versos endecasílabos, no desprovistos de artificio poético.

         Con la compensación, pues, el traductor se asegura de que el lector reciba la carga emotiva que lleva la obra original, aunque haya perdido algunos elementos que en origen la constituyen.

La compensación, en fin, trata de reestablecer el equilibrio textual producido por las inevitables pérdidas y ganancias semánticas de la traducción. Toda pérdida relevante de significado que tenga lugar al traducir algún segmento del TLO debe compensarse en otro punto del TLT:



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